Este año mi mujer y yo quisimos que nuestro hijo, aun siendo muy pequeñito, conociese el Mar por primera vez.
Es por ello que planeamos una escapada de 3 días a Nazaret, en Portugal.
Aunque el tiempo no fue muy bueno sí que pudimos disfrutar de unos agradables paseos por este pueblo, contemplando el encanto de sus calles, en donde de vez en cuando, en una esquinita, aparecía alguna mujer vestida con la uniformidad de la época de pescadores.
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En la playa, vendiendo pescado
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Pescado secándose en la playa |
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Pescado que pondrán a la venta una vez se seque
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La playa de Nazaret es bastante ámplia, y en ocasiones las olas llegan a ser de un tamaño importante.
De arena muy fina y blanca, como casi todo por Portugal, y con un agua bastante fría también.
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Al pie del acantilado |
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Paseando por la playa |
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El acantilado |
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Las olas |
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Playa y pueblo |
Aproveché y tomé unas fotos de las gaviotas, muy abundantes por la zona
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A comer |
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Bonito plumaje |
La zona más visitada de Nazaret quizá sea la zona de la playa propiamente dicha, pero al fondo, podemos divisar un acantilado, desde dónde podemos coger un pequeño tranvía que nos sube a lo alto, en donde podemos visitar otra zona de Nazaret.
Zona llena de turistas, autobuses y puestecillos, y en donde también nos podemos encontrar con varios restaurantes, museos, etc.
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Funicular
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Iglesia |
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Interior |
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La playa desde las alturas |
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Principal zona turística |
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El Mar en lo alto |
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Saliente |
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Navegando |
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Parece que va a llover |
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La playa, pueblo, funicular |
Y nada más, esto fue un día de playa en un viaje de escapada.
Joaquín